Los Roscos de vino y aceite de oliva con Thermomix son una auténtica delicia para los amantes de la repostería. Esta receta es una auténtica joya de la gastronomía española, ya que combina dos ingredientes muy típicos de nuestra cultura: el vino y el aceite de oliva. Esta receta es una combinación perfecta de sabores y texturas, ya que el vino aporta un sabor dulce y el aceite de oliva le da un toque crujiente y aromático.
Gracias al Thermomix, preparar esta receta es muy fácil y rápido. El Thermomix hace el trabajo por nosotros, mezclando los ingredientes y amasando la masa hasta conseguir una textura perfecta. Una vez lista la masa, esta se corta en forma de roscos y se fríen en aceite de oliva. El resultado es unos roscones crujientes por fuera y suaves por dentro, con un sabor y aroma únicos. Esta receta es una auténtica delicia que sorprenderá a todos los comensales.
Calentamos el horno a 180º antes de comenzar.
En el vaso, combinamos la harina, el azúcar blanquilla, el vino, el aceite de oliva, la levadura, los granos de anís y la sal. Configuramos el temporizador a 20 segundos y la velocidad a 5 para mezclar los ingredientes.
Espolvoreamos harina sobre la superficie de trabajo y colocamos la masa encima. Compactamos la masa con las manos hasta formar una bola.
Tomamos porciones de masa del tamaño de una nuez grande y las moldeamos para crear los roscos.
Revestimos solo un lado de los roscos con azúcar integral de caña y los colocamos en la bandeja del horno, sobre un tapete de silicona o una lámina de papel de horno, asegurándonos de que el lado con azúcar quede hacia arriba.
Cocinamos en el horno a 180º durante aproximadamente 20 minutos o hasta que estén cocidos.
Porciones 16